El lagarto está llorando.
La lagarta está llorando.
El lagarto y la lagarta
con delantalitos blancos.
Han perdido sin querer
su anillo de desposados.
¡Ay, su anillito de plomo,
ay, su anillito plomado!
Un cielo grande y sin gente
monta en su globo a los pájaros.
El sol, capitán redondo,
lleva un chaleco de raso.
¡Miradlos qué viejos son!
¡Qué viejos son los lagartos!
¡Ay, cómo lloran y lloran,
¡ay! ¡ay! cómo están llorando!
F. García Lorca
La poesía no necesita presentación, las cosas sencillas siempre nos hacen disfrutar.
Sencillez y ternura la de este Lorca tan popular.
ResponderEliminarUn saludo.
Pues sí que despiertan ternura estos largartitos, ahora falta que mis alumnos se la aprendan y la reciten.
ResponderEliminarsaludossss
Sobretodo cuando viene de las manos de un maestro
ResponderEliminarBesotes amiga
Entre largartitos, un besazo 40añera.
ResponderEliminarQué naif y grande está Lorca aqui... un abrazo
ResponderEliminarUn abrazo Ico, que bonito es el término que has utilizado naif, dentro de nosotros siempre queda algo del niño que una vez fuimos, cuando estos poemas nos acercaban a la poesia.
ResponderEliminar