muchacha en la ventana

"Lo que sé, lo puede saber cualquiera, pero lo que siente mi corazón solo lo conozco yo" Goethe

jueves, 29 de octubre de 2009

A Lope-A Urquijo

[A Lope de Vega]

Con heroica grandeza el sabio griego
cantó de aquel astuto peregrino,
el luengo discurrir, cuyo camino
tuvo por fin de Ítaca el sosiego.

Y del ilustre dárdano que el ruego
de Elisa desdeño y a Italia vino,
los varios casos resonó el latino,
plectro que celebró de Troya el fuego.

De el uno y otro a la sublime gloria
un peregrino en su fortuna aspira,
por la voz dulce y cortesano aviso

Del culto Lope, que en su nueva historia
tales sucesos canta con la lira
del peregrino que lo fue en Anfriso.

Juan de Arguijo



Sevilla fue la cuna de este poeta y músico español, encuadrado en nuestro magnífico Siglo de Oro, dentro del poderoso barroco. Vivió entre 1567-1623, destacado sobre todo por su labor de sonetista, fue procurador en las Cortes con Felipe III, distinguiéndose por su mecenazgo de artistas y escritores, hasta el punto que pasó estrecheces económicas en su vejez.


Se encuadraría dentro de la corriente clasicista, opuesta al culteranismo (cuya finalidad era impresionar y confundir con lo laberíntico, sensorial y disperso de la expresión, aplicándose al género lírico y al verso) tan en voga por sus cohetáneos a cuyo frente se encontraba Luis de Góngora. Dicha estética clasicista, apoyada en la erudición arqueológica, aparece hoy día en los criterios actuales como fría y culta, si bien goza de gran perfección y equilibrio que lucen su virtud en sonetos perfectos.


Su gran obra está centrada en temas mitológicos que serán los más numerosos, aunque también comprondrá sobre tema moral e históricos con el habitual desengaño y melancolía barroca, como: A Baco, A Troya, etc, y que por alejarme de mi abducción al mundo clásico no colocaré por aquí, a modo de no ser increiblemente aburrida. Su figura será reivindicada en el Neoclasicismo.


De su amistad con el gran Felix de los ingenios, nacerá este soneto y otras tantas conversariones epistolares con este y otros escritores barrocos. Y para muestra la respuesta de Lope:


[A Don Juan de Urquijo]


¿A quién daré mis rimas
y amorosos cuidados,
de aquella luz traslados,
de aquella esfinge eni[g]mas?
¿A quién mis escarmientos?
¿A quién mis castigados pensamientos?

A vos, famose hijo
de las musas, que sólo
a vos, de polo a polo,
para su centro elijo;
a vos, asilo sacro,
soberano de Apolo simulacro.

A vos, Mecenas claro,
dulce, divino Orfeo,
clarísimo Museo,
de los ingenios faro;
porque a vos dirigidas,
más que sus versos letras, tendrán vidas.

Aquí donde, sereno,
corre el Betis undoso,
y en mi llanto amoroso
dio al indio mar veneno,
con mal acorde lira
canté lo que a mi genio Febo inspira.

Esto os doy, aunque veo
que es aqua en ruda mano.
El don es pobre y llano;
alto y rico el deseo.
Cisne de amor parezco;
la voz postrera a vuestro nombre ofrezco.

Para mayores cosas
levanto el armonía
del plectro que solía
tratar las amorósas
por ver si el laurel verde hallo en las armas, que en amor se pierde.


Félix Lope de Vega y Carpio (1562-1635) es uno de los más importantes poetas y dramaturgos del Siglo de Oro español y, por la extensión de su obra, uno de los más prolíficos autores de la literatura universal. Llamado Monstruo de la Naturaleza (por Miguel de Cervantes), renovó las fórmulas del teatro español en un momento en que el teatro comienza a ser un fenómeno cultural y de masas.


Máximo exponente, junto a Tirso de Molina y Calderón de la Barca, del teatro barroco español, sus obras siguen representándose en la actualidad y constituyen una de las más altas cotas alcanzadas en la literatura y las artes españolas. Fue también uno de los grandes líricos de la lengua castellana, se le atribuyen 3.000 sonetos, 3 novelas, 4 novelas cartas, 9 epopeyas 3 poemas didácticos y varios centenares de comedias. Amigo de Quevedo y de Juan de Ruiz de Alarcón, enemistado con Góngora (así Lope y Urquijo compartian enemistad con este) y envidiado por Cervantes, su vida fue tan extensa como su obra.


La historia quiere que uno de los mayores periódos culturales y artísticos dentro de la historia de España, se encuadrara dentro del decaimiento político, social y económico en el marco de lo que fue un día el imperio español, donde nunca se ocultaba el Sol.

12 comentarios:

  1. Es verdad, madame, que contradiccion, esa decadencia politica frente al florecimiento cultural tan importante como fue el Siglo de Oro.
    Menos mal que algo florecia entre las ruinas!

    Feliz tarde, madame

    Bisous

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  2. Dame, eso es lo que más me choca del barroco, tanto esplendor cultural pero íbamos de culo en cualquier de los otros aspectos.

    feliz tarde madame, yo haré lo que pueda

    besosss

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  3. Da gusto esta comunicación tan placentera, lejos de las diatribas entre Góngora y Quevedo.
    No conocía a Urquijo, pero del "fenix de los ingenios", que se puede decir que no se haya dicho ya; que Inglaterra tenía a Shakespeare, pero nosotros teníamos cuatro o cinco.
    Un abrazo

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  4. J. Carlos, para que aprendamos de los grandes,con cartas. La verdad que es curiosa la relación entre ambos, amigos que compartían las mismas inquietudes, un tipo de poesía, y un enemigo común.

    A Urquijo he conocido como siempre, de casualidad buscando un libro de poesía en la biblioteca. Pero que tenemos más de cuatro u cinco.

    un saludo

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  5. El hambre agudiza el ingenio. Es cierto que las etapas más críticas o sombrías de nuestra historia coinciden con épocas de esplendor artístico y literario: el Siglo de Oro, la Edad de Plata. Y al contrario: épocas de mayores avances y progresos suelen ofrecer un panorama cultural más triste. La época de la Ilustración, una era de reformas, de progreso material e intelectual, ofrece una literatura para mi gusto más pobre y poco creativa, eso sí: muy didáctica y útil (Jovellanos, Moratín...)

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  6. Estoy deacuerdo Cayetano, así somos los homo sapiens. Y digo yo, por esa misma regla, y según commo está el asunto hoy día, también es un momento de auge cultural???

    quien lo sabe??

    un saludo

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  7. Muy buena diatriba, estoy con Cayetano épocas sombrías en la política han dado épocas luminosas en lo artístico y literario. Pero actualmente no ocurre,.. ¿ por qué será? Hasta en eso hemos perdido glamour... un saludo..

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  8. Hemos perdido muchísimo, será por las nuevas tecnologías o la ignorancia que hay entre la población, a pesar que es la época donde la tasa de analfabetismo es más baja...lo desconozco...un saludo Ico

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  9. Quizá no ocurra porque, a pesar de la apreciación personal que tengamos del paro o la crisis, ésta es una época de abundancia y riqueza comparada con la miseria de los españoles de aquellos tiempos. Es una época anodina y pobre culturalmente ésta que nos ha tocado vivir.
    O al menos eso es lo que creo.
    Un saludo.

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  10. Cayetano, visto de esa manera, tienes razón en lo de la abundancia, pero claro son otros tiempos históricos, a lo mejor no vemos las joyas de la cultura porque somos cohetáneas a ellas. Ya sabes hasta que no llegen las pertinentes revisiones históricas.

    por lo pronto, vivimos en una época sin fuste, pero menos mal que tenemos nuestros blog para teclear y teclear, algo hemos cambiado.

    un saludo

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  11. Lope e Vega tenía ascendencia de Cantabria,la familia de su madre tenía una casona en Vega de Villafufre.

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  12. Opiüm,es bueno saberlo, para cuando realice mi viaje hacia el norte peninsular, a ver si se puede visitar.

    un saludo desde las tierras andaluzas

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